FINAL DE LOST:
Locke le dice a a Jack que no esperaba una acción tan previsible de parte de Jacob al dejarle su lugar, nosotros tampoco hasta esta parte del capítulo. Desmond es la clave en esta segunda posibilidad. Quién es el héroe y quién el villano?
Más allá de encontrar personajes tipo que guarden bondad absoluta o maldad esquizoide, el final de Lost intenta llevar a los personajes a la humanidad y a la voluntad. Dejar de ser esos seres perdidos que no tienen más explicación que la soledad. Los que logran salir de la isla, es decir, la realidad paralela que lo hace encuentra redención, los otros deben sacrificarse en todo momento. El monstruoso humo negro se convierte en la luz, y para tocar lo más sublime hay que tocar primero el fondo. El capítulo final de Lost puede reducir al fin la serie a un laberinto en el que se es arrojado por una extraña causa que se desconoce hasta el final; antes habrían de encontrarse de frente con el minotauro, que fueran los propios errores y temores de cada personaje -no hay monstruosidad mayor para reconocerse después desnudo frente a la vida-. Y todos los fans agradecemos esta última parte.
Vaya, por fin pudimos ver a Jack y Kate besarse y aceptar que se aman, no extrañaremos más a aquellos que murieron, ahí están Shanon, Said, Charly, Livy, otros. Sabíamos desde todas las temporadas que hasta no encontrar este equilibrio los personajes no serían libres, y a pesar de las acciones que ya esperábamos, creo que nos quedamos un buen sabor de boca, pues junto con ellos llegamos a su justificación después de seis cortos años. La historia truinfó con la nobleza de Hugo -incluso la soledad de Benjamin- y gracias al valor del buen Jack. Aunque en dado momento recuerde más a un caballero del zodiaco por su aparente inmortalidad, que a un ser común.
Todos descansan en paz y esta fue la única salida posible, un Requiem For Lost.
NOTA PREVIA:
