Deshidratar la fruta es una buena opción para tener en la alacena fruta tanto de temporada como de fuera de temporada, y si lo haces en casa resulta más económico que comprarlas en bolsas en el súper. No todas las frutas son factibles de este proceso.
La frutas que se aconseja deshidratar o secar son: Plátano, manzana, pera, durazno, uvas, kiwi, fresa, naranja, piña, higo y algunas otras más, (también pueden ser algunas verduras) estas frutas pueden tener diferentes usos, como: comerse solos como una golosina, integrarlas al yogur o a algún guiso o ensalada. Su valor nutricional es alto, aportan vitaminas, fibra, pero también azúcares, así que no se debe de exceder su consumo.
También existen los frutos secos que la gran mayoría conocemos y consumimos (nueces, almendras, pistaches, avellanas etc., por lo que no debemos confundirlos con frutas secas o deshidratadas. A diferencia de las frutas secas, los frutos secos adquieren esta condición mediante un proceso natural, tienen menos de un 50 % de agua, son muy energéticos, ricos en grasas, en proteínas, algunos de ellos aportan vitamina B y omega 3.
Existen varios métodos para desshidratar o secar la fruta:
1.- Al aire libre (este es el proceso de secado más lento) Se corta la fruta en rebanadas muy finas, 1 milímetro de grueso cuidando que no se rompan, se colocan en bandejas o charolas sobre papel aluminio, y esperar por 10 días para que estén completamente deshidratadas. Este método es el más antiguo, menos recomendable y menos higiénico, ya que permanecerán al aire libre (dentro de la casa o fuera de ella).
2.- Horno convencional: Método rápido pero de sumo cuidado, hay que revisar constantemente para que no se vayan a quemar. Se procede al cortado de las frutas (las que tengan cáscara habrá que quitársela) de 1 milímetro de grueso. Se extiende la fruta sobre charolas para horno o rejillas. El horno debe de estar a una temperatura muy baja, de ser posible dejar la puerta abierta unos 5 ó 10 centímetros para facilitar la salida del vapor, (esto sólo si no se tienen pequeños en casa, sino, con la puerta cerrada).
Vigilar que no se quemen, el tiempo es variable, dependiendo de la fruta puede durar entre 3 y 6 horas en el horno, sacar y terminar el proceso fuera de él, para que se enfríen.
3.-Horno de Microondas: Este método también requiere paciencia y supervisión constante para que no se quemen. Coloque la fruta ya cortada directamente en el plato giratorio bien lavado y seco, cuida que tengan espacio entre fruta y fruta. Elige la opción «descongelar» durante 30 minutos, y voltea de vez en vez.
Si pasado este tiempo aún no está bien deshidratada la fruta, repite el proceso pero ahora de 5 minutos en 5 minutos para evitar que se queme.
Retíralas del horno, y deja enfriar algunas horas para poder envasarlas en frascos de vidrio limpios y esterilizados que cierren herméticamente.
4.- deshidratador de frutas y verduras ( son aparatos específicos para tal fin) y la forma más sencilla de realizar el secado de frutas. Existen varios modelos en el mercado, algunos de ellos son: